“Lo que busca la Argentina no es un podio, sino ser campeón”

Su caso es extraordinario y con escasos antecedentes en el deporte nacional. Aquel 13 de diciembre de 2009, en Salta, Jimena Cedrés entró en la historia de Las Leonas al debutar con sólo 16 años en el primer equipo.

Y si bien en los últimos tiempos no se registraron hechos similares en la disciplina, su caso sólo puede ser comparado con el del futbolista Javier Mascherano, quien en 2003 debutó en el Seleccionado mayor antes de hacerlo en la primera división de su club, River Plate. Lo mismo le sucedió a la volante de San Fernando en aquella serie internacional contra Gran Bretaña, cuando al entrar como suplente (uso la camiseta número 28) hizo su presentación en el equipo dirigido por Carlos Retegui sin haber jugado antes en la formación principal de su club.

La historia de Jimena empezó a mediados del 2009, cuando Retegui la vio en un partido en el que San Fernando enfrentó a GEBA. “Justo ese día él fue a ver el encuentro de la quinta categoría en donde yo jugaba. Ahí me observó y primero charló con mis padres, comentándoles la idea de que yo pudiera entrenar con el Seleccionado mayor. Ellos (sus padres) no me dijeron nada y decidieron guardarme la sorpresa, hasta que un día el Chapa me llamó por teléfono para decirme que al día siguiente debía ir al CENARD para entrenar con el mayor. ¡Imaginate mi cara! (se ríe) No lo podía creer, e incluso hasta que no estuve ahí, entrenando, no me lo podía creer”, recordó Cedrés desde Uruguay donde integra el Seleccionado Sub 17 (dirigido por Santiago Capurro) que compite en el primer Panamericano de la categoría.

¿Cómo te recibió en aquel momento el grupo de Leonas?
La verdad que las chicas me recibieron bárbaro… Me trataron como una más y me tuvieron muchísima paciencia ya que, lógicamente, yo entré con un ritmo distinto al de ellas. Siempre me alentaron y me hicieron sentir muy cómoda y les agradezco mucho por eso.

¿Cómo viviste tu debut en el segundo juego de la serie contra las británicas en Salta?
El momento más fuerte, en donde realmente te dabas cuenta de dónde estabas, fue durante el Himno Nacional. Ahí comencé a lagrimear como toda una nena (se ríe). La emoción me ganó: te acordas de tu primer entrenamiento, de tus comienzos y no podes creer en el lugar que estás y al lado de quienes. En el momento que Chapa (Retegui) me dijo que tenia que entrar, lógicamente me agarraron muchos nervios, pero adentro de la cancha se me fueron al saber que todo el equipo me apoyaba. Terminé el partido satisfecha por mi rendimiento y me puso muy contenta.

¿Qué balance personal pudiste hacer de aquel Test Match?
Muy bueno, ya que conocí y me abrí a gente mucho mas grande que yo. Pude soltarme, conocí además a gente bárbara y me llevé muchas cosas de todo tipo. Aprendí muchísimo en todos los aspectos.

¿Con respecto al Panamericano que están jugando, qué balance hicieron de la fase de grupos? Terminaron primeras, con 29 goles a favor y sólo uno en contra…
Nos fue realmente bien, contra México lo único en contra que tuvimos fueron los nervios del debut, pero por suerte pudimos meter un gol al primer minuto y después de ese momento nos soltamos: pudimos entrar en el ritmo del torneo, conocer la cancha y tomar esa confianza de equipo. Luego, contra Canadá se dio el partido más duro de la zona ya que ellas juegan muy bien con la bocha y nosotras entramos un poco nerviosas de cara a lo que podía pasar, tanto que empezamos perdiendo el partido. Pero eso nos despertó y terminamos disputando el mejor encuentro de esta fase y finalizamos ganando por una gran diferencia. Contra Paraguay era otro partido la verdad, ya teníamos asegurada la clasificación y sabíamos que era un equipo muy inferior al nuestro. Entonces, decidimos no arriesgar nada y hacer un juego tranquilo. Por suerte se nos dieron los goles y ganamos 11 a 0. Fue una fase tranquila que nos ayudó a tomar confianza. Estamos motivadas y sabemos que ahora se viene lo mas lindo del torneo.

¿Cuales son las expectativas de cara a la semifinal contra Estados Unidos?
Sabemos que va a ser un encuentro duro, pero si jugamos tranquilas y con seguridad, sabemos que podemos tener el control del trámite.

Los resultados invitan a soñar con el título ¿Cómo hacen para manejar la ansiedad y evitar pensar que los partidos están ganados de antemano?
Eso es un punto importante. Todas no paramos de soñar con ganar y nos imaginamos en la final. Pero cada vez que alguna salta con un comentario, tratamos de controlarnos entre nosotras. Por ejemplo, ahora que estamos en semis y alguna de nosotras dice: “PORQUE EN LA FINAL…” inmediatamente la interrumpe otra compañera con un “PRIMERO HAY QUE GANAR LA SEMI”. Pero sí, la ansiedad siempre está y tratamos de que no nos coma. Sabemos bien que tenemos que ir partido por partido y que las cosas van a llegar solas de esa manera.

¿Cómo describirías el grupo humano que se formó?
La verdad, es bárbaro, nos llevamos bien entre todas. No solo entre jugadoras sino también con los entrenadores y todo el cuerpo técnico. Constantemente se escucha algún chiste ,algún canto ,alguna cargada y siempre después viene una risa. Nadie se puede quejar la verdad, la pasamos muy bien en el grupo.

¿Por último, Argentina está para campeón?
Realmente si, porque estamos haciendo las cosas bien. Estuvimos entrenando muy duro las semanas anteriores, todas hicimos un esfuerzo muy grande para llegar hasta acá, dejando de lado asunto personales para enfocarnos de lleno al Panamericano. Además lo que busca Argentina no es un podio, sino ser campeón.


Extraído de : www.simplementehockey.com.ar/ Fuente : Confederación Argentina de Hockey

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