Le ganó 1-0 a República Checa con un gol de Mario Almada. El equipo de Lombi jugó mejor pero no pudo ampliar la diferencia. Mañana, ante Estados Unidos. Sólo habrá un pasaje en juego y Bélgica será el gran adversario.
Argentina llegó a este certamen sin el rodaje que hubiese querido. Es que la gira europea que pensaba realizar el seleccionado fue suspendida por la Confederación por la falta de presupuesto. Así, pensando los partidos con videos y sin tener la posibilidad de testear el nivel con otros equipos, llegó la Selección Masculina a su primer encuentro, en el que fue el claro dominador, con más fuerza que buen juego.
En los primeros minutos a Argentina le costó hacer pie. Pero cuando Argentina se adueñó del medio todo cambió. Tal es así que la presión del delantero Mario Almada en ese sector, cuando corrían once minutos, fue clave para llegar al gol. Almada tocó la bocha para Lucas Vila y la fue a buscar al segundo palo, desde donde ya cayéndose puso el 1-0. A partir de ahí, aunque de a poco, la peligrosidad del equipo argentino se hizo notar y fue cómo llegaron los córners cortos, un arma letal de este seleccionado que tiene grandes ejecutantes. Sin embargo, el que también dijo "presente" fue el arquero checo, que evitó en los tres córners del primer tiempo que la bocha ingrese al arco. En contrapartida, las únicas dos jugadas fijas con las que contaron los visitantes demostraron el bajo nivel de República Checa, ya que ambas fueron mal servidas.
En el complemento, la desesperación le empezó a jugar en contra al seleccionado nacional. La necesidad de marcar la superioridad también en el resultado le pesó en contra al equipo, que casi consigue el 2-0 en el sexto corto del partido, ejecutado por Matías Vila, que impactó en el travesaño. En el final llegó la única clara del conjunto checo aunque no le llevó mayores problemas al arco de Juan Espinosa.
Fuente: Diario Clarín
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